El
siguiente artículo ha sido escrito por el clarinetista americano Andrew
Simon, quien es el actual clarinetista principal de la la Orquesta
Filarmónica de Hong-Kong. Agradecemos al autor por su amable permiso en la
publicación de este texto en Clariperu.
Recientemente, cuando la Filarmónica de Hong-Kong anunció un puesto de clarinete, recibí muchas llamadas telefónicas de todas partes del mundo pidiéndome consejos para la preparación. Esto me ha inspirado a escribir este artículo a modo de respuesta y para ayudarles a ahorrar dinero en sus cuentas de teléfono. Si usted ya se cansó de poner pretextos perfectamente legítimos en por qué no tocó bien en la última audición y desea hacerlo bien en cada una de ellas, es hora que se remangue las mangas y mire hacia adelante. Pero primero, recuerde: si se prepara apropiadamente y siente que ha hecho un buen trabajo, pues usted ha hecho su labor. Ahora el jurado tiene que hacer el suyo.
El punto de participar en una audición es que usted deberá mostrar en tres minutos que puede hacer lo que nadie más puede. Esto es, impresionando al comité evaluador con el refinamiento y la seguridad de su ejecución, no mostrando meramente cuan rápido puede tocar. Piense: el jurado, ¿escogería a un solista presumido o a un instrumentista con mentalidad de equipo? Los conciertos aún ejecutados de memoria pueden ser cuestionables. Por ejemplo, si usted audiciona para el puesto de segundo clarinete, e interpreta el mismo concierto que el clarinetista principal ofreció el mes pasado con la música en el atril, quizás lo intimide delante de sus colegas. Recuerde que las primeras rondas de audiciones sirven generalmente para eliminar candidatos, no para impresionar con cualidades particulares. Así que, cualquier oportunidad que usted tome para impresionar al jurado, lo puede llevar al fracaso, especialmente si los abruma. Nunca toque como si usted tiene una cualidad para demostrar (aunque sí la tenga). Toque con comodidad y placer. La mayoría de los jurados están hartos de mirar y oír a postulantes nerviosos.
Lo que ha sido escrito hasta ahora es mi mi método personal. Si usted le pregunta a cien exitosos postulantes que es lo que hicieron para prepararse y durante una audición, obtendrá con seguridad cien respuestas diferentes. Recuerde, una buena preparación ofrece gran confianza. ¡Feliz preparación!
¿Verdadero
o falso? Las audiciones para ingresar a una orquesta profesional son a
menudo injustas, poco tienen que ver con cuan bien capacitado se
encuentre el postulante para hacer el trabajo, pueden ser políticas,
frecuentemente tienen jurados que son peores que la mayoría de los
aspirantes y son, en muchos casos, la única manera de obtener un
trabajo fijo. Si contestó verdadero a todo esto, ¡probablemente usted tiene experiencia en audiciones!
Andrew Simon |
Recientemente, cuando la Filarmónica de Hong-Kong anunció un puesto de clarinete, recibí muchas llamadas telefónicas de todas partes del mundo pidiéndome consejos para la preparación. Esto me ha inspirado a escribir este artículo a modo de respuesta y para ayudarles a ahorrar dinero en sus cuentas de teléfono. Si usted ya se cansó de poner pretextos perfectamente legítimos en por qué no tocó bien en la última audición y desea hacerlo bien en cada una de ellas, es hora que se remangue las mangas y mire hacia adelante. Pero primero, recuerde: si se prepara apropiadamente y siente que ha hecho un buen trabajo, pues usted ha hecho su labor. Ahora el jurado tiene que hacer el suyo.
El punto de participar en una audición es que usted deberá mostrar en tres minutos que puede hacer lo que nadie más puede. Esto es, impresionando al comité evaluador con el refinamiento y la seguridad de su ejecución, no mostrando meramente cuan rápido puede tocar. Piense: el jurado, ¿escogería a un solista presumido o a un instrumentista con mentalidad de equipo? Los conciertos aún ejecutados de memoria pueden ser cuestionables. Por ejemplo, si usted audiciona para el puesto de segundo clarinete, e interpreta el mismo concierto que el clarinetista principal ofreció el mes pasado con la música en el atril, quizás lo intimide delante de sus colegas. Recuerde que las primeras rondas de audiciones sirven generalmente para eliminar candidatos, no para impresionar con cualidades particulares. Así que, cualquier oportunidad que usted tome para impresionar al jurado, lo puede llevar al fracaso, especialmente si los abruma. Nunca toque como si usted tiene una cualidad para demostrar (aunque sí la tenga). Toque con comodidad y placer. La mayoría de los jurados están hartos de mirar y oír a postulantes nerviosos.
He encontrado tres puntos importantes que se deben cultivar durante el período de la preparación para una audición:
1. El punto que nadie descuida es el de aprender bien el repertorio. Si usted no ha tocado antes los solos, escúchelos. Extraer los solos en un solo disco - probablemente sólo veinte minutos de música - podría también ser tiempo bien empleado para audiciones futuras. Usted los podría escuchar en el auto o mientras sale a correr. Practique lentamente hasta que obtenga completa solidez en sonido, dinámicas, afinación, etc. Días antes de la audición, puede acelerar sus tempos. Grabe sus propias ejecuciones y analice, ponga un metrónomo junto con la grabación y escuche atentamente. ¿Dónde me apresuro, atraso? Etc.
2. Sea consciente de su práctica de técnica básica diaria en todo momento. El punto de ejecutar solos orquestales es saborear cómo es su sonido, afinación, ritmo, articulación, y agilidad. Practique ejercicios diarios para mejorar en estos aspectos. Si usted no obtiene el trabajo, ¡por lo menos habrá mejorado su ejecución!
3. Finalmente, y este es el punto mas descuidado: cerciórese que se presentará de lo mejor ese día. ¿Con qué frecuencia ha oído decir a un postulante luego de presentarse, toqué terrible? Practique la visualización mental – imagínese tocando realmente bien. Mírese desde el punto de vista de la audiencia: usted está seguro y luce radiante y lleno de gusto. Ahora póngase dentro de su propio cuerpo, un cuerpo que no tiembla, pero que siente y suena bien.
Uno o dos puntos extras: toque para personas que respeta mucho y también para personas que no son de su agrado. Si usted puede ejecutar en frente de personas que quieren que usted suene mal, puede entonces tocar para un jurado. Grabe los solos de la audición sin detenerse, en diferente orden. Averigüe con anticipación la afinación del piano que se utilizará, ¡usted no necesita sorpresas! Establezca una rutina diaria de práctica con mini-metas, por ejemplo, tener un pasaje a cierta velocidad en cierto día. Ese día, vístase como para un recital. Los expertos de la moda llaman a esto el poder de vestido. Y recuerde que, el proceso de preparación, incluye el asegurarse de contar con una caña apropiada para el gran día. Lleve consigo un libro que no requiere mucha concentración. Considere llevar algunos plátanos (que alivian los nervios) y beba mucha agua.
1. El punto que nadie descuida es el de aprender bien el repertorio. Si usted no ha tocado antes los solos, escúchelos. Extraer los solos en un solo disco - probablemente sólo veinte minutos de música - podría también ser tiempo bien empleado para audiciones futuras. Usted los podría escuchar en el auto o mientras sale a correr. Practique lentamente hasta que obtenga completa solidez en sonido, dinámicas, afinación, etc. Días antes de la audición, puede acelerar sus tempos. Grabe sus propias ejecuciones y analice, ponga un metrónomo junto con la grabación y escuche atentamente. ¿Dónde me apresuro, atraso? Etc.
2. Sea consciente de su práctica de técnica básica diaria en todo momento. El punto de ejecutar solos orquestales es saborear cómo es su sonido, afinación, ritmo, articulación, y agilidad. Practique ejercicios diarios para mejorar en estos aspectos. Si usted no obtiene el trabajo, ¡por lo menos habrá mejorado su ejecución!
3. Finalmente, y este es el punto mas descuidado: cerciórese que se presentará de lo mejor ese día. ¿Con qué frecuencia ha oído decir a un postulante luego de presentarse, toqué terrible? Practique la visualización mental – imagínese tocando realmente bien. Mírese desde el punto de vista de la audiencia: usted está seguro y luce radiante y lleno de gusto. Ahora póngase dentro de su propio cuerpo, un cuerpo que no tiembla, pero que siente y suena bien.
Uno o dos puntos extras: toque para personas que respeta mucho y también para personas que no son de su agrado. Si usted puede ejecutar en frente de personas que quieren que usted suene mal, puede entonces tocar para un jurado. Grabe los solos de la audición sin detenerse, en diferente orden. Averigüe con anticipación la afinación del piano que se utilizará, ¡usted no necesita sorpresas! Establezca una rutina diaria de práctica con mini-metas, por ejemplo, tener un pasaje a cierta velocidad en cierto día. Ese día, vístase como para un recital. Los expertos de la moda llaman a esto el poder de vestido. Y recuerde que, el proceso de preparación, incluye el asegurarse de contar con una caña apropiada para el gran día. Lleve consigo un libro que no requiere mucha concentración. Considere llevar algunos plátanos (que alivian los nervios) y beba mucha agua.
Lo que ha sido escrito hasta ahora es mi mi método personal. Si usted le pregunta a cien exitosos postulantes que es lo que hicieron para prepararse y durante una audición, obtendrá con seguridad cien respuestas diferentes. Recuerde, una buena preparación ofrece gran confianza. ¡Feliz preparación!