30 de octubre de 2003

Entrevista a Wenzel Fuchs - clarinetista de la Filarmónica de Berlín

Una de las orquestas que goza de una justa popularidad es la Filarmónica de Berlín. Los más grandes solistas y directores de orquesta han realizad veladas históricas junto a este extraordinario elenco alemán.

Cada uno de sus miembros es un destacado instrumentista, los cuales mantienen a la par una carrera internacional como solistas. Wenzel Fuchs es uno de los clarinetistas principales de esta afamada orquesta. A continuación le presentamos la entrevista exclusiva realizada por Marco Mazzini para Clariperu. conversación
 realizada en octubre del 2003 en Bélgica.

Del 26 al 28 de octubre del 2003, el coro de clarinetes del Conservatorio Real de Gante (Bélgica)  se encuentra en plena grabación de su segundo disco. Una de las obras a grabarse es el Concierto para dos clarinetes de F. Krommer. Los solistas son Eddy Vanoosthuyse, profesor principal de clarinete de la institución mencionada y director del ensamble; y Wenzel Fuchs, clarinetista principal de la Filarmónica de Berlín. Durante una merecida pausa para los miembros de esta agrupación, y entre docenas de clarinetes, micrófonos y sillas, Marco Mazzini conversó con el clarinetista austriaco en exclusiva para Clariperu.

* T
e agradezco mucho por aceptar esta entrevista.
El gusto es mío. Creo que tenemos suficiente tiempo. Vamos, conversemos un poco.

*
Cuéntame un poco como así ingresaste al mundo de la música.
Bueno, en mi casa mi padre es músico y mis hermanos también. Todos ellos tocaban en una banda, mayormente música popular. Yo crecí escuchando mucha música folklórica en Tirol, el pueblo donde nací. Ya que todos ellos tocaban instrumentos de metal, mi madre fue de la idea de que yo eligiera un instrumento de madera. El clarinete fue entonces mi opción. Empecé tocando música popular, luego me dedique al estudio formal del instrumento. Estudié primero en el conservatorio de Innsbruck con Walter Kefer, y luego  viajé para estudiar en Viena en la Hochschule fur Musik, esta vez con el profesor Peter Schmidl.

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¿Cuál es tu experiencia orquestal antes de ser miembro de la Filarmónica de Berlín?
Cuando tenía 18 años ingresé a la Orquesta de la Opera de Viena. También he formado parte de la Orquesta Sinfónica de la Radio de Viena. Luego, en 1993, ingresé a la Orquesta de Berlín. También he tocado mucho como solista en Europa y Japón.

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¿Cuál es para ti la mayor diferencia entre la orquesta de la Opera de Viena y la de Berlín?
Wenzel Fuchs solista con la Filarmónica de Berlín. Clariperu
Primero que nada, depende del repertorio, de la música que tocan y del director. Creo que, en general, me gusta más la orquesta de Berlín, ya que es una agrupación con mucha energía y vida. Pero para Mozart y Beethoven prefiero las cuerdas de Viena. Ahora, la sección de vientos de la Filarmónica de Berlín es muy compacta, con un sonido redondo, quizás no muy grande, pero siempre pulcro. Personalmente no me gusta las orquestas en donde los vientos, especialmente el clarinete, suenan muy estridentes. No lo encuentro bello. Yo me crié con este concepto del sonido: Pulcritud y consistencia sin necesidad de sonar demasiado. Es además el sonido que la orquesta demanda. Por ejemplo, admiro mucho como toca Eddy (Vanoosthuyse) ya que su sonido es hermoso ¡y bastante grande!

* ¿Cuál es tu opinión sobre las llamadas escuelas de clarinetes?
¿Te refieres al sistema del clarinete alemán?

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No, me refiero a la manera de tocar: la escuela francesa, alemana, británica..
Ah, ya veo. Lo que creo es que eso ya no existe, y si existe aún, está desapareciendo. Ahora es el individuo. Cada uno toca como prefiere. Eddy por ejemplo, no sé como definirlo. No suena alemán, quizás un poco francés pero más refinado (por cierto, no me gusta mucho el sonido francés). Todo está ahora tan mezclado. Depende del individuo y su entorno. Hace poco estuve en España y me agrada mucho como tocan ahí, es bastante distintivo.

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¿Qué hizo Wenzel Fuchs diferente para poder ser elegido en la Filarmónica de Berlín?
Esa pregunta es la misma que si alguien te dijera “dónde queda el Madison Square Garden” (mira un punto fijo en la pared y señala con una mano):  Dirección, eso es todo. ¿Quieres algo? Pues anda y persíguelo. Ten una meta, un sueño y trabaja duro por ello, practica mucho, mucho. La práctica te lleva lejos. Eso es todo. Se necesita talento, en eso también creo, pero nunca es suficiente. Muchas horas de práctica te hacen un buen músico, ya que el talento en si no te ayuda mucho. Yo practiqué y practiqué y lo sigo haciendo. Si no tienes una meta, no vas a ningún lado. Yo quería estar en esa orquesta y lo logré. Ten una visión para que sepas a dónde quieres ir. 

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¿Quién es la persona, colega o maestro que más te ha influenciado? ¿Algún héroe?
Bueno, debo decir que no muchos clarinetistas, excepto mi maestro en Viena. Eso sí, muchos violinistas y en general los instrumentistas de cuerdas a quienes escucho mucho….y Horowitz. Tuve la oportunidad de verlo en Viena cuando tocó uno de los conciertos de Mozart. Fue una tremenda experiencia, una vivencia única que me ha enseñado de por vida. Qué musicalidad. Cada vez que toco Mozart trato - digo trato - de aprender de esa experiencia, de evocarla. Pero tu vez, ¡no soy Horowitz!. 

*
¿En cuanto a tus gustos personales, ¿Por qué tipo de música te inclinas más?
Yo he tocado mucha, mucha música y es difícil para mí nombrar preferidos. Depende de como me sienta: Cuando es navidad no es lo mismo que cuando sale el sol en verano, con el cielo celeste. Igual, mi gusto por la música cambia. Me gusta mucho Mozart y Beethoven, siempre que sean bien tocados, y esto mayormente depende del director. 

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¿Y en cuanto a la música de vanguardia, contemporánea?
También la he tocado mucho, sobre todo en la orquesta. Tu sabes, hay los compositores de residencia de esta o aquella ciudad, y para ser honesto, a menudo es aburridísimo. Muchas veces ensayamos catorce veces para un solo concierto. Te cansas. También he tocado Xenakis, Ligeti, Maderna, hasta que llegó el momento en que el gusto por esta música desapareció. Ya no me llama mucho la atención. Pero estoy experimentándola con otra visión una vez más. Nuestro nuevo director está incluyendo en nuestros programas, tanto música clásica como moderna, y  es interesante, incluso importante: No se debe mostrar un solo rincón, sino un poco de todo para poder ver todos los lados de la música.

He visto en Internet que has grabado un disco para el sello discográfico Naxos, y te comentaba que me costó un poco encontrar información sobre tu persona.
Con Naxos grabé el quinteto de Max Reger hace dos años. Internet... mmm... bueno, te confieso que no estoy muy interesado en figurar en internet. Entiendo que hay músicos que sí cuentan con su propia página web con información sobre sus carreras. Yo no necesito eso, me preocupo más por tocar. Lo mismo sucede con las grabaciones, hay músicos que quieren grabar y grabar, se desesperan por tener disco propios. Eso no va con mi persona. He grabado un disco con música de Brahms (Sonata n°1), Weber (Dúo concertante), Schumann (Fantasy Pieces) y Poulenc (Sonata). Tengo un segundo disco con el concierto de Mozart. Por ahora suficiente. 

*
¿Tienes alumnos actualmente?
Por ahora sólo tengo dos, y solo recibo estudiantes que ya están graduados.

* Siempre me gusta preguntar, ¿cómo contribuyes al desarrollo de la musicalidad de tus alumnos?
Buena pregunta. Musicalidad…primero que nada, el alumno debe oír mucha música, ir a conciertos, recitales, respirar música. Si no sale de él mismo, si no tiene motivación propia, pues no creo que llegue muy lejos. El alumno que espera que el profesor le dé todo, es un pésimo alumno, recibirá muy poco. Es él quien debe mostrar el interés por avanzar, por aprender. Escuchando música podrá discernir, con la ayuda de su maestro, entre lo bueno y lo malo, y claro está, sabrá entonces tomar lo bueno. Creo que como maestro los oriento, nada más. 

* ¿Algunas últimas palabras?
Agradecerte por  tus preguntas, y que me siento muy contento de ser parte de esta experiencia (la grabación).  Creo que hemos hecho un buen trabajo, todos ellos son muy buenos clarinetistas. Un verdadero gusto.


   Esta conversación se llevó a cabo en la sala de conciertos Miry del Conservatorio de Gante, en Bélgica. Un poco apurado ( ya que venían a recogerlo más temprano de lo esperado) y con una sonrisa en el rostro, Wenzel se retira preguntando si venden cerveza en el conservatorio.