La final del prestigioso Concurso Internacional de Clarinete Jacques Lancelot se llevó a cabo el 23 octubre de 2021 en la Capilla Corneille en Rouen, Francia. Entre los ganadores de esta quinta edición se encuentra un clarinetista Latinoamericano. Se trata de Héctor Noriega, joven clarinetista mexicano que obtuvo el tercer lugar en este exigente concurso, que fue desarrollado de manera presencial y que tuvo un jurado internacional muy exigente. El primer lugar fue otorgado a Julien ChunYen Lai y el segundo lugar a Luz Sedeño.
Clariperu felicita a Héctor por este gran logro que inspira a nuestra comunidad. El obtener este premio ha sido el resultado de una preparación meticulosa y una mentalidad positiva. Para conocer más a este sobresaliente músico, lo invitamos a compartir con nosotros sobre su vida y su experiencia en este concurso.
Estimado Héctor, ¿cómo te iniciaste con el clarinete?
Inicié con el clarinete a los diez años con el maestro Luis Miguel Balseca en la Casa de la Cultura de Hermosillo, Sonora, México, de donde soy originario. Pero mi historia en el mundo de la música comienza desde los tres años, cuando inicié tomando clases de piano. A los seis años empecé a estudiar saxofón con mi primo Alain Mendoza y fue a los diez años que por primera vez tuve contacto con el clarinete.
Vengo de una familia de músicos, desde mis tíos, primos y abuelos, pero nada relacionado con la música clásica, sino con lo popular mexicano, como la cumbia y la banda. Desde pequeño, veía a mis familiares tocar en las fiestas del pueblo cerca de mi ciudad, Matape, Sonora y ahí fue donde empezó mi gusto por el saxofón y el clarinete. Como todos sabemos, es normal que la misma persona toque ambos instrumentos y por eso quería tocar los dos. Pero por ser muy chiquito los brazos no me alcanzaban todavía para sostener la parte de abajo del clarinete, y por eso tuve que esperar. En el mundo clásico comencé en el 2008, cuando me llegó la invitación para pertenecer a la Orquesta Juvenil de Sonora ya que requerían a un clarinetista. Y desde ahí empezó mi largo, difícil y muy bonito camino en esta carrera.
¿Dónde estás estudiando actualmente el clarinete?
Actualmente estoy en mi cuarto y último año de licenciatura (Bachelor of Music) en Juilliard School en la ciudad de Nueva York, con el maestro Jon Manasse. Anteriormente estudié dos años con el maestro Yehuda Gilad en Colburn School en Los Ángeles, California.
¿Cómo fue tu experiencia en el concurso Jacques Lancelot? ¿Cuál fue tu mayor desafío en este concurso internacional?
Es una experiencia única y una semana muy bonita que la recordaré por siempre. No fue nada fácil, porque el nivel de competencia es sumamente elevado. Para ser sincero, nunca esperé nada y tampoco imaginé pasar a la semifinal, pero las cosas se dieron de la mejor manera. El concurso estaba planeado para realizarse en octubre de 2020, pero por obvias razones se pospuso para este año 2021. Durante el verano de 2020 yo estaba en mi casa y no sabía qué pasaría con el concurso, no le di importancia y lo único que hacía era estudiar todas las obras. En mi caso creo que me ayudó el hecho que nos hayan avisado un mes antes que el concurso se reprogramaría para el 2021. Durante el confinamiento me mantuve motivado en mi casa estudiando y tomando clases en línea.
Lo más complicado fue la ronda final. No es fácil tocar delante de un jurado reconocido a nivel mundial, pero en mi experiencia, se me hizo mucho más complicado tocar enfrente de los demás concursantes y de un gran público en Francia, sobre todo cuando se trata del Concierto para clarinete de W. A. Mozart que todos lo conocemos y seguramente es el sueño de todo clarinetista tocarlo acompañado de una orquesta. En mi caso, el día de la final fue la primera vez que toqué este concierto como solista. Y también debo darle mucho crédito al Concerto Breve del gran compositor francés Nicolas Bacri, quien tuvo el honor de escribirlo para ser estrenado en la final del concurso. Después que dieran los resultados de la ronda semifinal, todo sucedió muy rápido, porque teníamos ensayo esa misma tarde con la orquesta y una sesión de fotos. Fue complicado mentalizarme para tocar Mozart y Bacri en tan solo unas horas como solista y en la final de un concurso, porque como lo dije, no pensaba pasar a la semifinal, mucho menos a la final. Creo que hice un buen concierto y aprovecho en felicitar a Julien ChunYen Lai y a Luz Sedeño quienes hicieron una excelente participación y sus premios son bien merecidos.
En tu experiencia, ¿qué consejo compartirías con otros clarinetistas que desean presentarse en concursos internacionales?
Foto: Arnaud Bertereau |
Ahora recuerdo esos momentos y me pongo a pensar que todo valió la pena. Hay una foto en mi Instagram de ese ensayo. Así que el mejor consejo que les puedo dar es hacer un plan de estudios con muchos meses de anticipación y proponerse tener todo listo dos o tres semanas antes del concurso. Las dos siguientes semanas restantes que sean solamente para tocar de principio a fin, grabarse y escuchar qué es lo que se puede mejorar en términos musicales y aprender a estar conectado con el piano. Todo el aspecto técnico ya debe de estar listo. También hacer uno o varios recitales, si es posible antes de concursar. En mi caso, yo ofrecí uno días antes de viajar a Francia y eso me ayudó bastante, porque tuve comentarios de mi maestro, de las personas de mi escuela que asistieron y sobre todo porque tuve la oportunidad de escuchar la grabación del recital y luego mejorar ciertos detalles.
¿Qué planes tienes a futuro como clarinetista?
Este año termino mi licenciatura en Juilliard. Tengo varias audiciones para orquestas en Estados Unidos o también hay la posibilidad de hacer una maestría, pero eso lo sabré hasta el siguiente semestre.
¿Algunas palabras de despedida para nuestra comunidad?
Agradecer al Maestro Marco Antonio Mazzini por invitarme a hacer esta entrevista y contento que sea para Clariperu, ya que entiendo la importancia y sé que es la asociación del clarinete en Latinoamérica más reconocida en todo el mundo. Espero que les sirva y que sigan estudiando mucho porque los sueños se pueden hacer realidad, solo hay que proponerse y trabajar duro para lograr nuestras metas. Es muy complicado y quizás se piense que es imposible, pero con paciencia, dedicación y esfuerzo se puede lograr.
Espero poder visitarlos pronto en Perú. ¡Y a seguir estudiando!